La nueva estación china de Qinling en la Antártida marca un año de funcionamiento sostenible en condiciones duras.

La Estación Qinling de China, su estación de investigación más joven de la Antártida, marca su primer año de funcionamiento, mostrando resiliencia en condiciones extremas. Situada en Isla Inexpresable, la estación cuenta con un sistema de energía híbrido que combina energía eólica, solar, de hidrógeno y diesel, reduciendo las emisiones de carbono. Se basa en el agua de mar desalinizada para satisfacer las necesidades de agua y cuenta con un diseño aerodinámico que ha resistido duras condiciones antárticas. La estación tiene como objetivo convertirse en una plataforma clave para la investigación internacional sobre el cambio climático.

Hace 1 mes
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