Los manifestantes se reunieron en las capitales estatales de todo el país el 5 de febrero, oponiéndose a las políticas de Trump y al papel federal de Elon Musk.
El 5 de febrero de 2025, los manifestantes se reunieron en las capitales de los estados de Estados Unidos para oponerse a las políticas de la administración del presidente Trump, incluido el papel de Elon Musk en las agencias federales y la disolución de USAID. En New Hampshire, más de 200 manifestantes se concentraron frente a la Casa del Estado, mientras que en Vermont, más de 1.000 personas protestaron frente a la Casa del Estado. El movimiento nacional, llamado "50-50-1", tenía como objetivo expresar su preocupación por varias órdenes ejecutivas y la amenaza percibida a las instituciones democráticas.