El estudio de Auckland revela que las escuelas urbanas carecen de biodiversidad, lo que sugiere que las plantas nativas podrían mejorar el aire, la sombra y el bienestar.
Un estudio de 64 escuelas primarias urbanas en Auckland encontró que los espacios verdes están dominados por campos deportivos con pocas plantas nativas, destacando la falta de biodiversidad. La investigación sugiere que agregar árboles y arbustos nativos alrededor de los campos puede mejorar la calidad del aire, proporcionar sombra y aumentar el bienestar de los niños. También señala que incluir plantas nativas como harakeke y tī kōuka puede apoyar el aprendizaje cultural y la biodiversidad.
Hace 2 meses
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