El primer ministro del Reino Unido, Starmer, defiende la gestión de los apuñalamientos en Southport en medio de peticiones de investigación.
El primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, defendió su manejo del caso de apuñalamientos en Southport, donde Axel Rudakubana se declaró culpable de matar a tres niños, citando limitaciones legales. Starmer reconoció que Rudakubana había sido señalado a las autoridades antiterroristas tres veces, pero insistió en que revelar detalles podría haber puesto en peligro la acusación. El gobierno del Reino Unido ha ordenado una investigación independiente sobre el fracaso del Estado para prevenir el ataque.
Hace 2 meses
281 Artículos