Australia considera que los impuestos fronterizos sobre el carbono protegen las industrias locales y combaten el cambio climático.

La revisión de Australia sobre la prevención de las "fugas de carbono" sugiere la adopción de un mecanismo de ajuste de las fronteras de carbono (CBAM). Esto aplicaría gravámenes a las importaciones intensivas en carbono de países sin políticas climáticas estrictas, ayudando a industrias locales como la producción de cemento, acero y amoníaco. La Unión Europea y Gran Bretaña también están considerando la posibilidad de adoptar medidas similares, lo que lleva a Australia a explorar esta opción para garantizar la competitividad y reducir las emisiones.

Hace 3 meses
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