Tres hombres que apelan sus condenas por secuestro y torturar a Kevin Lunney cuestionan la admisibilidad de los registros telefónicos y las grabaciones de CCTV.
Tres hombres condenados por secuestrar y torturar a Kevin Lunney, director de Quinn Industrial Holdings, están apelando sus condenas. Alan Harte, Alan O'Brien y Darren Redmond argumentan que el uso de registros telefónicos como evidencia fue una invasión de la privacidad y que las grabaciones de CCTV no juradas no deberían haber sido admitidas. Harte recibió una sentencia de 30 años, O'Brien 25 años, y Redmond 18 años con tres suspendidos.
Hace 3 meses
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