Los exploradores documentan el impacto destructivo de la pesca de arrastre de fondo en los ecosistemas de aguas profundas, presionando por políticas de conservación más estrictas.
Los exploradores del océano Ghislain Bardout y Emmanuelle Périe-Bardout han documentado el grave impacto de la pesca de arrastre de fondo, un método de pesca que arrastra redes a lo largo del fondo marino, en la zona mesofótica, a 30-150 metros por debajo de la superficie. Fundaron Bajo el Polo para reunir conocimiento científico sobre estos ecosistemas profundos, con el objetivo de informar las políticas de conservación y proteger la vida marina de la destrucción causada por la sobrepesca, la contaminación y el cambio climático. A pesar de su daño ambiental, la pesca de arrastre de fondo todavía está permitida en muchas zonas, incluidas algunas zonas protegidas.