Las ciudades de EE. UU. transforman los espacios de oficinas vacíos en viviendas para combatir las altas tasas de vacantes y los impactos económicos.
Ciudades estadounidenses como Nueva York, Austin y Boston están convirtiendo edificios de oficinas vacíos en viviendas debido al aumento de las tasas de vacantes de oficinas, una tendencia exacerbada por el cambio de la pandemia hacia el trabajo remoto. Las altas tasas de vacantes amenazan con disminuir el valor de las propiedades y los ingresos fiscales, lo que afecta a los servicios esenciales. Para combatir esto, las ciudades están utilizando exenciones fiscales y cambios de zonificación para transformar los espacios de oficinas en áreas residenciales, con el objetivo de crear vecindarios vibrantes las 24 horas del día, los 7 días de la semana.