El departamento de salud de Idaho fue el primero en Estados Unidos que prohibió la administración de vacunas COVID-19 en seis condados.
El Departamento de Salud del Distrito Sudoeste de Idaho se ha convertido en el primer organismo de salud pública en los Estados Unidos que tiene prohibido administrar vacunas COVID-19 a residentes de seis condados, tras una decisión de junta estrecha. Las razones detrás de la decisión no están claras, pero ha despertado preocupación entre los expertos en salud sobre el acceso a las vacunas y el precedente que puede sentar. Los críticos argumentan que este movimiento va más allá de los casos anteriores en los que los departamentos de salud dejaron de ofrecer vacunas debido al costo o la baja demanda, en lugar de cuestionar el producto médico en sí.