Raves subterráneas se extendieron por toda China, ofreciendo a los jóvenes una salida rebelde en espacios ocultos.
Las raves subterráneas están ganando popularidad en lugares escondidos en las ciudades de China, ofreciendo a los jóvenes una salida de la sociedad cada vez más controlada del país. Estos eventos, a menudo celebrados en edificios abandonados, cuentan con música tecno y proporcionan un espacio para la resistencia contra las normas sociales. Los organizadores y participantes, como DJ Xing Long, ven las raves como una forma de libertad y auto-expresión, existente en una zona gris más allá del control del estado. A pesar de los riesgos, la escena subterránea prospera, marcando una creciente tendencia de resistencia cultural entre los jóvenes chinos.