Las empresas australianas están ordenando camiones eléctricos pesados para reducir las emisiones, pero enfrentan desafíos regulatorios.
Las empresas australianas, entre ellas Coles y CD Dodd, están adoptando cada vez más camiones eléctricos pesados para reducir las emisiones, con 150 pedidos previstos para 2025. En la actualidad, 65 camiones eléctricos están en funcionamiento. Los expertos advierten que las leyes estatales incoherentes podrían obstaculizar los objetivos de reducción de emisiones. Martin Merrick, de Volvo Group, hace hincapié en la necesidad de una legislación armonizada, incentivos financieros y una mejor infraestructura de carga para apoyar el cambio a los camiones eléctricos y alcanzar los objetivos netos cero para 2050.
November 02, 2024
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