El think tank británico T&E propone un nuevo impuesto sobre el combustible de avión para abordar una brecha fiscal de 22 mil millones de libras, aumentando potencialmente entre 400 y 5.900 millones de libras anuales y aumentando los pasajes aéreos.
El grupo de expertos Transport and Environment (T&E) del Reino Unido propone un nuevo impuesto al combustible para aviones para ayudar a abordar una brecha fiscal de 22 mil millones de libras, que podría aumentar de 400 millones de libras a 5.9 mil millones de libras anuales. El impuesto comenzaría el año próximo a las 9p por litro y aumentaría gradualmente para igualar el impuesto sobre el combustible de carretera en 2030. Esto podría dar lugar a tarifas aéreas más altas, ya que las compañías aéreas podrían repercutir los costes a los pasajeros. El sector de la aviación, que actualmente contribuye significativamente a las finanzas públicas, ya se ha comprometido a lograr emisiones netas cero para 2050.