2.000 plantas farmacéuticas estadounidenses no inspeccionadas desde antes de COVID-19 plantean problemas de seguridad.
La FDA se enfrenta a una importante acumulación de casi 2.000 plantas farmacéuticas que no han sido inspeccionadas desde antes de la pandemia de COVID-19, lo que representa aproximadamente el 42% de las instalaciones registradas en los Estados Unidos. Esto plantea preocupaciones sobre la seguridad de los medicamentos críticos, incluidos los antibióticos y las terapias contra el cáncer. Las inspecciones se interrumpieron en gran medida en marzo de 2020 y se reanudaron lentamente, con un descenso del 40% en los números de inspección en 2021. La FDA cita la escasez de personal y las limitaciones de inspección internacional como factores que contribuyen.