El calentamiento de los océanos en Nueva Zelandia afecta a las redes alimentarias marinas, afectando a las especies de peces y a las pesquerías potencialmente devastadoras.
El calentamiento de los océanos afecta las redes alimentarias marinas de Nueva Zelanda, causando cambios en las poblaciones de plancton y afectando a las especies de peces. El aumento de las temperaturas se ha intensificado en las aguas costeras y oceánicas de la región desde 1982, lo que ha provocado una disminución de las microalgas beneficiosas y un aumento de las floraciones nocivas. Se prevé que esto empeorará, con posibles consecuencias devastadoras para la pesca y la vida marina de Nueva Zelandia. El estudio pone de relieve la necesidad urgente de abordar el cambio climático y sus consecuencias para los ecosistemas marinos y las economías humanas que dependen de ellos.