3.7 millones de indonesios jugaron en línea ilegalmente el año pasado, poniendo $ 20 mil millones en apuestas.
Indonesia se enfrenta a un importante problema de juego, con 3,7 millones de ciudadanos participando en juegos de azar en línea el año pasado, poniendo $20 mil millones en apuestas a pesar de ser ilegal. El gobierno ha intentado combatir esto bloqueando los sitios web de apuestas en el extranjero y haciendo una lista negra de algunos servicios VPN, pero los jugadores han encontrado maneras de eludir las restricciones. El problema ha dado lugar a un aumento de suicidios, asesinatos y divorcios relacionados con la adicción al juego, lo que ha llevado al gobierno a establecer un grupo de trabajo dirigido a los operadores y al crimen organizado. Sin embargo, los críticos argumentan que los esfuerzos no son suficientes y que el grupo de trabajo necesita investigar redes criminales más grandes detrás de la industria del juego en línea.