Los jóvenes de Gen Z sienten una inmensa presión para ser perfectos, lo que conduce a una mayor ansiedad y preocupación, según un estudio de la Walton Family Foundation, Gallup y la psicóloga adolescente Lisa Damour.
Un estudio reciente de la Walton Family Foundation, Gallup, y la psicóloga adolescente Lisa Damour revela que los jóvenes de 10-18 años de edad de Gen Z sienten una inmensa presión para ser perfectos, lo que conduce a un aumento de las emociones negativas, en particular la ansiedad, entre las niñas y adolescentes. Aproximadamente dos tercios de los jóvenes de Gen Z se preocupan por el futuro del mundo, y Damour sugiere que los padres pueden apoyar a sus hijos ayudándoles a sentirse cómodos cometiendo errores y validando que no necesitan ser perfectos. Los padres también deben involucrar a sus hijos en conversaciones acerca de sus preocupaciones, con la clave de escuchar activamente y tomar sus sentimientos en serio.