Un investigador de optometría de la Universidad de Houston advierte contra el uso de terapia con luz roja de bajo nivel.
Un investigador de optometría de la Universidad de Houston advirtió contra el uso de la terapia con luz roja de bajo nivel (LLRL) para controlar la miopía, particularmente en niños, debido a una posible lesión de la retina. A pesar de su eficacia reportada para reducir la progresión de la miopía, la terapia LLRL puede presentar riesgos de daño fotoquímico y térmico a la retina, ya que su perfil de seguridad no se ha investigado completamente. A los niños que utilizan la terapia se les indica que miren un instrumento que emite luz roja durante tres minutos, dos veces al día, lo que puede exceder los límites de seguridad. El investigador encontró que ambos dispositivos LLRL evaluados excedieron la exposición máxima permitida a la dosis de luminancia, poniendo la retina en riesgo de daño fotoquímico.