El sistema de armas láser DragonFire, un sustituto barato y de disparo rápido de los misiles, fue probado por el Ministerio de Defensa del Reino Unido, lo que supuso un avance importante en la tecnología militar de vanguardia.
El Reino Unido ha disparado con éxito un arma láser de alta potencia contra un objetivo aéreo por primera vez en una prueba, con el objetivo de allanar el camino para una alternativa de bajo coste a los misiles para derribar objetivos como drones. El Ministerio de Defensa describió la prueba en su campo de tiro de las Hébridas en Escocia como un "paso importante" para poner en servicio la tecnología. La tecnología podría reducir la dependencia de municiones costosas y disminuir el riesgo de daños colaterales. Tanto el Ejército como la Royal Navy están considerando utilizar la tecnología como parte de sus futuras capacidades de defensa aérea. Las armas de energía dirigida por láser (LDEW) utilizan un intenso rayo de luz para atravesar su objetivo y pueden atacar a la velocidad de la luz. El sistema de armas DragonFire está siendo desarrollado por el Laboratorio de Ciencia y Tecnología de Defensa (Dstl) junto con algunos socios de la industria en nombre del Ministerio de Defensa. El desarrollo de armas láser se produce en medio del creciente uso de drones en la guerra, como se ha visto durante el conflicto entre Ucrania y Rusia. DragonFire es el resultado de una inversión conjunta de 100 millones de libras entre el Ministerio de Defensa y la industria armamentista.